MATÍAS BATTISTÓN
LA MADRE DE BECKETT TENÍA UN BURRO
EMECE

Páginas: 200
Tamaño: 13.5 x 21.0 cm.
Peso: 0.3 kgs.
ISBN: 9789500444255

Puesto a la tarea de versionar al castellano el tríptico de Samuel Beckett integrado por Molloy, Malone muere y El innombrable para una editorial independiente de Buenos Aires, el narrador de este libro revela su amor por los detalles inútiles, su facilidad para irse por las ramas y su versatilidad para patear para más adelante el deber. En su furiosa carrera hacia la procrastinación denitiva, el narrador irá acumulando ideas e historias de médiums y campos de concentración, de fugitivos y decapitados, de autores que difaman a sus traductores y de traductores que odian a sus autores en su persecución de Samuel Beckett, de forma que la traducción deviene en una pasión en todo sentido, incluido el etimológico: una tortura o un castigo, una manera de expiar culpas insospechadas. Escrito con prosa alada y un gran manejo del humor y la ironía, Matías Battistón ha compuesto una oda a esos trabajadores y trabajadoras que mueven las pequeñas ruedas de la maquinaria editorial, verdaderos héroes, la mayoría de las veces anónimos.

LA MADRE DE BECKETT TENÍA UN BURRO

$26.900,00
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Puesto a la tarea de versionar al castellano el tríptico de Samuel Beckett integrado por Molloy, Malone muere y El innombrable para una editorial independiente de Buenos Aires, el narrador de este libro revela su amor por los detalles inútiles, su facilidad para irse por las ramas y su versatilidad para patear para más adelante el deber. En su furiosa carrera hacia la procrastinación denitiva, el narrador irá acumulando ideas e historias de médiums y campos de concentración, de fugitivos y decapitados, de autores que difaman a sus traductores y de traductores que odian a sus autores en su persecución de Samuel Beckett, de forma que la traducción deviene en una pasión en todo sentido, incluido el etimológico: una tortura o un castigo, una manera de expiar culpas insospechadas. Escrito con prosa alada y un gran manejo del humor y la ironía, Matías Battistón ha compuesto una oda a esos trabajadores y trabajadoras que mueven las pequeñas ruedas de la maquinaria editorial, verdaderos héroes, la mayoría de las veces anónimos.